Si nos atenemos a los consejos difundidos por distintos profesionales responsables de nuestra salud, los más habituales nos orientan a realizar un consumo diario de una copa de vino tinto, que ponemos en práctica siguiendo sus orientaciones, por venir de quien viene, pero ante el desconocimiento de las razones que este consejo conlleva.
Nos proponemos describir de forma sencilla los argumentos ó las razones que avalan nuestra opinión:
.-Limpia nuestro paladar: En comidas copiosas, el vino tinto, debido a sus propiedades astringentes, evita la excesiva sensación de grasa causada por alimentos como las carnes rojas y permiten aligerar y degustar mejor la comida.
.-Combate las bacteria bucales: Al parecer, algunos compuestos presentes en esta bebida combaten las infecciones de las encías, frenan el crecimiento bucal de los estreptococos y bacterias vinculadas a las caries, además del de otros asociados a la gingivitis y dolores de garganta.
.-Agudiza el placer: Al beberlo con moderación, el vino tinto, libera las endorfinas en las zonas del cerebro, aumentando la sensación de placer, según diversos estudios (Universidad de California). Incluso, la luz ambiental, favorece esta sensación, de tal forma que si esta es roja o azul el placer y el sabor del vino son mucho más intensos y por el contrario cuando su tonalidad es verde ó blanca disminuye el placer de su sabor.
.-Mejora de la función cognitiva: Importante a tener en cuenta de las conclusiones a que han llegado abundantes estudios, con las pertinentes demostraciones, que se sustancian en que el consumo moderado de vino mejora el funcionamiento del cerebro y, en pequeñas cantidades, previene la demencia. Estos estudios, a su vez, han demostrado también que debido a la existencia de antioxidantes en el vino tinto, este reduce la inflamación e impide que las arterias se endurezcan y por consiguiente inhiben la coagulación, con lo que mejoraría el riego sanguíneo.
.-Reduce riesgo de cáncer: Para los hábitos de los fumadores, el vino tinto ayuda a reducir el riego de cáncer de pulmón. El vino tinto impide el desarrollo y crecimiento de las células responsables del cáncer de mama. Estas propiedades podrían deberse a la existencia del resveratrol, componente que frena los efectos del estrógeno, la hormona femenina por excelencia. Destacamos que el resveratrol de la uva disminuye los efectos tan perjudiciales de la vida sedentaria.
.-Aliado contra la grasa: El consumo de vino tinto activa la función de un gen que impide la formación de nuevas células de grasa y ayuda a movilizar las existentes. Conviene decir que si se consume de forma moderada la aportación de calorías(7/gr)no resultaría decisivo en el sobrepeso, particularmente en personas de edad avanzada.
.-Socio innegable del corazón: Aumenta los niveles de colesterol bueno en la sangre, anticipa y previene los síntomas en las complicaciones cardiovasculares, de ahí que el consumo de dos copas diarias de vino tinto en los hombres y una en las mujeres es un consejo a destacar.
.-Protector de la próstata: Con un consumo como el que estamos describiendo en los apartados anteriores y para las personas cuya edad sea de 40 años ó superior la recomendación del consumo de vino tinto conlleva a una reducción de los diagnósticos de cáncer de próstata.
.-Hábitos saludables: Recientes estudios (publicados en British Medical Journal) revelan que los proclives a la degustación del vino tinto suelen comprar alimentos más sanos y tener una dieta más equilibrada, consumiendo, por ejemplo, más frutas, verduras, quesos bajos en grasa, leche y carnes saludables.
Un saludo desde MisVinos.com