Si bien este aumento no se puede considerar, con carácter general, en todo el territorio nacional, sí se ha centrado fundamentalmente en Castilla-La Mancha, consiguiendo una producción de 33 millones de hectólitros de vino, cuando lo habitual ronda los 20 millones de hectólitros. Recordemos que en esta comunidad autónoma, aparte de su buena climatología, se ha reestructurado con nuevas variedades y sistemas de riego más productivos, también compensados económicamente con el pago único o el arranque.
Es de recibo decir que los viticultores de Castilla-La Mancha y el viñedo castellano manchego, a través de los planes de reestructuración y reconversión de viñedo, recibieron casi 1.000 millones de euros desde que se comenzó a aplicar esta medida en el año 2000.
Con este panorama, el pasado viernes día 27, han mantenido una reunión el secretario general de Agricultura y Alimentación, Carlos Cabanas y representantes del sector vitivinícola para estructurar una serie de acciones compensatorias a estas circunstancias y consideraciones entre las que destacamos:
Se descarta la posibilidad de solicitar la habilitación de fondos nacionales que conlleve a una destilación de crisis de un volumen de vino que se considere excedentario, ya que el sector dispone de medios de control de producción en el campo como es el caso de las Denominaciones de Origen Protegidas, Programas de Apoyo al vino, Utilización Racional de Riego……. que tan grata experiencia han resultado.
Posibilidad de constituir dentro de la Organización Interprofesional, de una Organización de Productores, cuya finalidad sea la del análisis y propuestas de solución dentro de una buena planificación y comercialización sobre la oferta. A su vez el Ministerio posibilitaría en el marco de la OCM Única una Norma de Comercialización para la inmovilización de las existencias en bodega sobre un determinado volumen y variedad de vino.
Dentro de esta campaña se bloquearía el vino blanco sin identificación geográfica en aquellas regiones donde la producción haya sido elevada y que llevarían a cabo los productores que hubieran tenido unos altos rendimientos y grandes existencias a fecha del 31 de julio del presente año. Esta medida se prolongaría por un periodo de tiempo de 6 meses, tiempo que se considera razonable para que las condiciones de mercado cambien y se recuperen. La medida en cuestión supondría una retirada del mercado de unos 4 millones de hectólitros.
Saludos desde Misvinos.com